Pizza Alemana de Salchicha con Mostaza

Hace unos días cenamos pizza y como tenía una salchicha alemana de esas grandotas, me sirvió para improvisar. Como anécdota, os contaré que hasta hace cuatro años no me gustaba nada la comida tipo pasta, pizza, salchichas, hamburguesas... ¡ni siquiera el ketchup ni las patatas fritas! Es que cuando éramos pequeños, a mi hermano sólo le gustaban esas comidas, así que todas las semanas comíamos lo mismo... ¡No soportaba más esas comidas! Así que, cuando me independicé, pasé años sin comer nada de esto. Fue mi novio, después de muchos intentos, el que consiguió que comiese de estas cosas otra vez.

Ingredientes:

- preparado de harina para pizza
- salsa de tomate
- salchicha alemana
- cebolleta
- pepinillos gigantes en lonchas
- mostaza suave
- queso rallado

Preparación:

Preparamos la masa de pizza siguiendo las instrucciones indicadas. Por supuesto, podemos hacer nuestra propia masa totalmente casera, pero a mí es que me pilló sin levadura y estos paquetitos de preparados sacan de muchos apuros.

Después de reposar la masa, la estiramos y cubrimos con los ingredientes: la salsa de tomate, la salchicha a rodajitas, la cebolleta cortada muy fina, los pepinillos muy picaditos, la mostaza la echamos dibujando una espiral y, por último, espolvoreamos el queso.

Metemos la pizza en el horno hasta que se gratine y la masa esté crujiente. Queda muy rica y la mostaza le da un toque especial.

Gelatina de Leche con Miel y Nueces

Hace una semana, mi novio pidió en una venta un postre al que llaman "flan de leche". Parecía una especie de cuajada, desmoldada como un flan, con miel y nueces por encima. Pero era tan sumamente blanca que no creo que llevase huevo... Cometí el error de no probarla así que no sé qué textura tenía. He intentado recrearla, sin embargo, se ve que no me ha salido igual (yo creo que no era flan de leche, sino una cuajada de toda la vida...). En cambio, he conseguido este postre muy rico, que me ha gustado hasta a mí, que por mi problema de intolerancia a la lactosa odio todo lo que sepa a leche... Realmente estaba delicioso, aunque tampoco he querido abusar y tomar demasiado.

Ingredientes:

- 1 litro de leche
- 2 sobre de gelatina neutra
- 3 cd de azúcar (o al gusto)
- miel de flores
- nueces peladas

Preparación:

En el fondo de un molde de flan de un litro (o varios moldes pequeños), ponemos un fondo de miel líquida. Metemos en el frigo o en el congelador para que se solidifique mientras preparamos la gelatina.

Se prepara como cualquier gelatina, pero sustituyendo el agua por leche. Así que calentamos la mitad de la leche y disolvemos en la mitad fría los sobres de gelatina. Cuando la leche esté caliente, apartamos del fuego y agregamos la mezcla de la gelatina. Movemos bien con varillas para que se disuelva y dejamos templar un poco.

Sacamos los moldes del frío y vertemos en ellos la gelatina. Metemos en la nevera y dejamos cuajar unas horas. Para desmoldar, metemos el culo del molde en agua caliente para que se derrita la miel y damos la vuelta al molde sobre un plato.

Decorar con algo más de miel y unas nueces peladas, como si fuese una cuajada.

Consejo: - Otro día probaré otras versiones, como por ejemplo, aromatizar la leche con vainilla o piel de naranja.

Torrijas de Leche Meladas

Estas son mis primeras torrijas y ¡¡¡Madre Mía cómo se puso la cocina....!!! Compramos el pan para torrijas del que vende el Mercadona, a ver cómo quedaban. La verdad es que salieron muy esponjosas, pero la próxima vez las haré con pan de verdad, a la antigua usanza... Bueno, eso si me atrevo otra vez a que la cocina acabe embadurnada de aceite!! Qué pechá de limpiar... Si alguna sabéis el truco para que no salpiquen tanto, contádmelo!

Ingredientes:

- 12 rebanadas de pan (ó 1 barra)
- 4 vasos de leche
- 2 cd azúcar
- 1 rama de canela
- corteza de naranja
- 3 huevos
- 125 ml miel de flores
- un chorrito de agua

Preparación:

Ponemos a calentar la leche en un cazo con la canela y la piel de naranja. Cuando esté caliente, agregamos el azúcar, removemos y apartamos del fuego. Dejamos reposar para que tome sabor y se temple.

Cuando la leche esté tibia (más bien tirando a fría), la colamos y la ponemos en una fuente. Vamos empapando las rebanadas de pan en la leche y reservando en otra fuente. No hay que remojarlas demasiado porque se nos pueden romper. Las dejamos reposar unos minutos para que la leche cale por dentro. Yo les dí la vuelta y las dejé unos minutillos más.

Mientras tanto, preparamos la miel para melarlas. Ponemos a calentar un chorrito de agua en un cacillo y, cuando hierva, vertemos la miel. Movemos con las varillas y dejamos cocer unos minutos. Después hay que dejar enfriar, pero al llevar agua, ya no se solidifica la miel.

Batimos los huevos y ponemos el aceite en una sartén al fuego. Vamos rebozando las torrijas en el huevo y friendo en el aceite. Las sacamos y las ponemos a escurrir en papel absorbente.

Cuando se templen un poco, ya podemos pasarlas por la miel y colocar en una fuente de servir.

Adobong Manok (Adobo de Pollo Filipino)

El adobo es uno de los platos más populares en Filipinas. Se puede hacer de pollo, cerdo o mixto. Se trata de una receta de origen español (también encontramos adobos en el Caribe, por ejemplo) pero con una marcada influencia china. Los españoles colonizaron Filipinas en el siglo XVI y estuvieron allí casi cuatro siglos, así que no ha de extrañar su influencia en las costumbres, el idioma y la gastronomía.

Ingredientes:

- 3 muslos de pollo (o medio pollo)
- 3 ajos
- 1 cebolla
- 2 hojas de laurel
- 1 ct pimientas negras
- jengibre en polvo (opcional)
- 1 cd rasa de azúcar moreno (opcional)
- 50 ml vinagre blanco
- 100 ml salsa de soja
- sal y aceite

Preparación:

Pedimos al carnicero que parta el pollo en trozos más bien grandes (como en la foto) y le deje la piel.

En una sartén honda, doramos el pollo y reservamos. En ese aceite, rehogamos la cebolla picadita y los ajos aplastados con piel. En algunas versiones le ponen también tomate a tiras, pero algunos filipinos comentan que, aunque lo usan, no es lo tradicional.

Incorporamos el pollo y regamos con el vinagre. Añadimos el laurel y los granos de pimienta y subimos el fuego para que evapore un poco. Yo le puse un poco de azúcar para rectificar la acidez del vinagre porque el que usan allí es algo más dulzón. Y con lo del jengibre pasa igual: en algunas recetas lo ponen y en otras no, así que puse sólo una chispita.

Ahora vertemos la salsa de soja, movemos bien y dejamos que cueza tapado a fuego lento hasta que el pollo esté tierno y hecho por dentro. Si se quedase muy seco, podemos ponerle medio vasito de agua. Aún así, debe de quedar muy poco líquido porque no se trata de un pollo en salsa, sino de trozos de pollo con una costrita caramelizada.

Lo tradicional es servir este plato acompañado de arroz blanco. Yo le puse arroz frito con ajo y luego hervido.

Habas con Jamón, Huevos Camperos y Morcilla de Burgos Ríos

Es el tiempo de las primeras habas y en el pueblo de Huétor-Vega, muy cerca de mi casa, éste es uno de los cultivos estrella junto con las alcachofas. El otro día fuimos a dar una vuelta para ver los campos sembrados y, curiosamente, fue la primera vez que ví las alcachofas en su mata. Me sorprendieron mucho porque no me imaginaba que una alcachofa fuese una minúscula florecilla entre una mata tan grande! Como tenía visita, preparé una comida típica granadina: habas fritas con jamón, huevos del campo (de los que siempre salen rojitos y con dos yemas) y morcilla. La morcilla típica es la de Güéjar-Sierra (morcilla de cebolla), pero esta vez tenía morcilla de arroz de Burgos.

Hace unos días, Embutidos Ríos me enviaron ¡¡tres kilos de morcillas!! Vaya, yo pensaba que para probarlas me llevarían un par de ellas... Además de apañados, se ve que son generosos. Me gustaría haber hecho una foto de los productos, pero faltó tiempo para que se repartieran entre algunos amigos y familiares. Se trata de morcilla de arroz de Burgos, muy diferentes a las típicas de aquí de Granada. Están buenísimas y muy jugosas. Además, tienen diferentes formatos: morcilla de arroz tamaño grande, morcilla de arroz y verduras (está de muerte!) formato grande, pinchitos de morcilla mediano y choricitos de morcilla pequeños, como para un picoteo. Así que os recomiendo que probéis esta marca cuando la veáis en el súper. Yo tengo que buscar a ver donde la venden.

Bueno, habréis notado que hoy estoy muy habladora... Os dejo la receta.

Ingredientes:

- 1 kg de habas ya peladas
- 1 cebolla
- 1 ajo
- jamón serrano a taquitos
- huevos del campo
- morcilla de arroz Ríos
- aceite de oliva artesano
- más ajos

Preparación:

En una sartén grande, calentamos un fondo de aceite y agregamos un ajo, la cebolla troceada a cuadraditos y las habas. Añadimos sal y vamos dejamos que se frían a fuego medio tapadas, moviendo de vez en cuando, hasta que estén tiernas. Antes de apartar, añadir el jamón serrano y dar unas vueltas para que se dore. Dejamos reposar para que tome sabor.

Mientras tanto, ponemos aceite en otra sartén y freímos los huevos con unos ajitos aplastados, con piel y todo. En otra, con una gotita de aceite, calentamos la morcilla. Servimos todo en un plato, acompañado de pan cateto. El aceite artesano y el pan cateto nos lo trajeron de Mijas mis padres, así que es una plato granadino-mijeño-burgalés, digamos...

Ternera con Mandarina al Estilo Chino

Esta es la receta que he elegido para participar en el concurso del blog de la Señorita Mandarina, en el que hay que elaborar un plato en el que se utilicen mandarinas, su fruta favorita. ¡¡Yo también soy una adicta a las mandarinas!! Al tratarse de una fruta, lo primero que se me ocurre es un postre, pero he querido hacer un plato salado, que es lo que a mí se me da mejor. Así que aquí va esta receta de ternera con mandarina al estilo chino!

Ingredientes:

- 400 g filetes finos de redondo de ternera
- unos ramilletes de brocoli
- unas mazorquitas de maíz
- 1/2 pimiento rojo
- 1 cebolleta
- 1 zanahoria
- 1 ajo
- jengibre en polvo
- 6 mandarinas
- 4 cd de salsa de soja
- 3 cd salsa hoisin
- 2 cd vino de arroz (o jerez seco)
- 1 pizca de chile triturado (opcional)
- 2 cd rasas de maicena
- aceite de sésamo
- fideos chinos (ver receta)

Preparación:

Si los filetes no son muy finos, los colocamos en una tabla entre dos capas de film transparente y damos unos golpecitos con el rodillo para aplanarlos. Quitamos la grasilla de alrededor y cortamos a tiras. Reservamos en un tupper.

Debemos elegir unas mandarinas que sean dulces, con bastante zumo y con la piel pegadita. Las cortamos por la mitad y reservamos algunas rodajitas del centro para decorar. El resto las estrujamos, colando el zumo para que no tenga pepitas. Lo mezclamos con la salsa de soja y la salsa hoisin (y si queremos, una pizquita de chiles triturados de los que tienen en las vinagreras de los restaurantes). Mezclamos bien con las varillas. Para quienes no la conozcan, la salsa hoisin es la que te sirven con el pato pekinés, sólo que la mía es más afrutada y tiene un toque como a ciruela y canela.

Regamos la ternera con la marinada y dejamos reposar al menos media hora. Pasado este tiempo, escurrimos bien y reservamos la salsa, que usaremos más tarde.

Cortamos la cebolleta y el pimiento a cuadraditos y la zanahoria a rodajitas. Separamos algunos ramilletes del brócoli y lo cocemos (yo lo cocí junto con los fideos chinos).  Ponemos el aceite de sésamo en una sartén o wok y salteamos la cebolla, la zanahoria, el pimiento y el ajo aplastado a fuego medio-fuerte. Añadimos los ramilletes de brócoli cocidos y las mazorquitas y salteamos un poco más. Ponemos sal, aunque poquita porque la soja ya es salada. Es muy importante que la verdura quede al dente, así que no se debe cocinarse en exceso.

Apartamos la verdura y, en esa misma sartén, echamos la carne escurrida. La doramos a fuego fuerte sólo hasta que cambie de color. Salamos un poco y reservamos junto con las verduras.

Mezclamos la marinada reservada con dos cucharadas rasas de maicena y un poquito de jengibre en polvo (aunque si podemos ponerle jengibre fresco rallado es mejor). La pasamos a la sartén y la dejamos espesar a fuego medio-bajo, moviendo con las varillas. Entonces incorporamos la verdura y la carne y dejamos calentar un poco.

Servir inmediatamente, decorada con rodajas de mandarinas (o gajos pelados) y acompañada de fideos chinos, por ejemplo. Podéis ver la receta en el enlace, aunque en esta puse menos ingredientes por ser un acompañamiento. Llevan calabacín, cebolla, zanahoria, jengibre y soja.

Fish 'n' Vegs

El fish 'n' chips (pescado y patatas fritas) es un plato muy típico inglés. Lo venden mucho en puestos de comida rápida por la calle. Yo lo he reinterpretado un poco: en vez, de patatas, he puesto cebolla y champiñones fritos (de ahí do le "vegs"), y, en vez de merluza, he usado perca.

Ingredientes:

- filetes de perca
- champiñones
- cebolla dulce
- huevo
- pan rallado
- harina
- salsa tártara
- aceite y sal

Preparación:

Cortamos a tiras la cebolla y a cuartos los champiñones. Ponemos sal al pescado y la verdura. Los empanados los hice de la siguiente forma: el pescado está rebozado en huevo y pan rallado, los champiñones en huevo y harina, y la cebolla sólo en harina.

Vamos friendo también en ese orden: pescado, champiñones y cebolla (para que no se nos enfríe mucho) y colocando sobre papel absorbente. Servir acompañado de salsa tártara.

Bacalao con Tomate

He estado varios días fuera, pero ya he vuelto y toca ponerse al día con las recetas atrasadas que dejé sin publicar. A ver si, con la cabecita que tengo, me acuerdo de lo que le eché a cada plato!! Como estamos en Cuaresma, he empezado a hacer algunas recetas con bacalao. Os dejo ésta, muy facilita, de bacalao con tomate. ¡Y lo siento, la presentación no me quedó muy bien con la prisas!

Ingredientes:

- 4 trozos de bacalao desalado
- tomate triturado
- 1 cebolla
- 1 ajo
- azúcar
- harina
- sal, pimentón y aceite

Preparación:

Primero hay que preparar la salsita de tomate. Sofreímos la cebolla y el ajo picaditos. No importa si los trozos son grandes porque después trituraremos la salsa. Añadimos el tomate triturado, le ponemos azúcar, sal y pimentón dulce y dejamos que se vaya friendo hasta que esté hecho. Después pasamos por la batidora y trituramos hasta que la salsa quede finita.

Por otra parte, rebozamos el bacalao desalado con la harina y lo freímos. Escurrimos sobre papel absorbente y colocamos dentro de la sartén con la salsa de tomate. Calentamos un par de minutos y ¡listo para comer!

Steak & Guinness Pie (Pastel de Carne Irlandés)

Para terminar con el menú de San Patricio, tomamos este Steak & Guinness Pie como plato principal. La traducción viene a ser algo como "Pastel de Filete y Guinness", aunque suene raro... Es uno de los mejores platos irlandeses que he probado ¡y lo pienso comer muchas veces más! Así que si aún no lo habéis probado, aquí os dejo la receta. ¡No sé cómo he vivido sin haber comido tal manjar!

Ingredientes:

- 550 g de filetes de redondo de ternera
- 2 ajos
- 1 cebolla dulce (ó 2, si son chicas)
- 2 zanahorias
- 1 puñado de guisantes congelados
- unos champiñones pequeños
- 2 cd concentrado de tomate
- 1 cd colmada de harina
- 33 cl de Guinness
- 1 vaso de caldo de ternera
- unas gotas de salsa Worcester
- laurel, tomillo y romero
- sal y pimienta
- mantequilla y aceite
- una lámina de hojaldre
- huevo batido

Preparación:

Lo primero es preparar el guiso del relleno el día anterior. Debemos pedir que los filetes de redondo sean gruesos para luego cortarlos a daditos, más bien chicos, como los que véis en la foto. Picamos la cebolla y los ajos y los rehogamos en la olla con la mezcla de mantequilla y aceite (o sólo aceite, si preferimos). Cuando esté pochada, agregamos la carne troceada y subimos el fuego para sellarla. Luego salpimentamos.

Espolvoreamos la carne con harina y freimos unos minutos. Entonces añadimos la cerveza negra y movemos bien para disolver la harina. Cuando empiece a hervir, añadimos también el vaso de caldo y dejamos que se caliente. Ahora podemos incorporarle el concentrado de tomate, las zanahorias y los champiñones picados, los guisantes, la salsa Worcester y las hierbas aromáticas. Dejamos cocer a fuego medio durante 1 1/2 ó 2 horas, hasta que la carne esté tierna y la salsa se haya espesado y casi consumido.

Para seros sincera, lo tuve cociendo no sé si tres cuartos o una hora. Luego, preocupada por el facturón de la luz, y como la salsa ya había reducido, lo pasé a la olla express y lo dejé 10 ó 15 minutillos para que la carne se quedase tierna. Dejamos el guiso reposar de un día para otro para que se asiente y tome sabor. Su aspecto es éste:

Ponemos el guiso en una cazuelita o en un molde se soufflé. Ahora, espolvoreamos y estiramos la masa de hojaldre. Con ella cubrimos la superficie de nuestro pastel y replegamos los bordes. Pintamos con huevo batido y ponemos algún adornito. Yo le hice un trébol, para que quedase muy irlandés.

Hornear a 180 ºC hasta que la superficie del hojaldre esté doradita.

Es un pastel que queda muy tierno y jugoso. El sabor, después de haberse asentado, es extraordinario... No tengo palabras para describirlo. Lo que os recomiendo es que uséis cazuelitas individuales si las tenéis. Este pastel, como era para mi novio y para mí, lo puse en un moldecito para dos. Os deja otra foto del corte:

Irish Coffee

La foto no me ha salido muy bien porque mientras buscaba un sitio donde poner la copa, se me ha ido mezclando la crema y el café, así que cuando tenga una foto mejor la cambiaré... Tampoco tengo la cafetera más adecuada para prepararlo, así que os explicaré cómo se preparaba en la cafetería donde trabajaba.

Ingredientes:

- café expresso
- whiskey irlandés
- 2 cd azúcar moreno
- nata para montar

Preparación:

La nata para montar tiene que ser bastante grasa. Hay que dejarla al menos un día o dos en la nevera. Para montarla, yo le puse una pizca de sacarina, pero sólo si queréis. Para obtener la textura de la irish cream no hay que batir la nata en exceso, sólo lo justo para que quede algo densa.

En la cafetería, poníamos el whiskey y dos sobrecillos de azúcar moreno en el fondo de la copa y lo calentábamos con el pitorillo ese de las cafeteras (con el que calientan la leche). De este modo se quedaba con una textura densa y como acaramelado. Después, se preparaba el expresso en una jarrita aparte y se vertía sobre el whiskey con mucho cuidado para que no se mezclasen.

Allí usaban nata montada de la de bote, pero yo le he puesto la nata a medio montar, vertiéndola con mucho cuidado sobre una cuchara del revés. En teoría, se deben de ver las tres fases, pero como no pude hacer lo del whiskey...

Cerveza Verde de San Patricio

Como os contaba en la entrada anterior, el Día de San Patricio todo se tiñe de verde. ¡Incluso la cerveza! Normalmente se usa Blue Curaçao o colorante azul, pero como yo no tenía nada de eso, he usado Rives Azul. Y, por cierto, entre un intento y otro, hemos descubierto unos cócteles de cerveza muy ricos que iré poniendo en el blog. ¡Me gustan hasta a mí que no soy muy aficionada a la cerveza!

Ingredientes:

- cerveza rubia
- blue tropic

Preparación:

El único truco aquí es poner el Blue Tropic o el Colorante primero y luego verter sobre él la cerveza. De este modo, se mezclan bien y no se mancha la espuma. Eso sí, el Rives le cambia el sabor pero no queda nada mal...

¡¡Feliz Día de San Patricio!!

Aunque es una fiesta irlandesa, es conocida y celebrada en todo el mundo. Conmemora la muerte de San Patricio, patrón de Irlanda e introductor del cristianismo en ese país. Es una celebración tan importante que está declarada fiesta nacional. Vamos, que viene a ser como el Día de la Hispanidad aquí. Se hacen desfiles por las calles, hay teatros, bailes y músicas tradicionales... Los irlandeses se sienten muy orgullosos de sus símbolos - el trébol y el arpa - y de su color, el verde, por eso no es de extrañar que ese día todos se vistan de este color y que, además, todo sea verde!! ¡¡Hasta la cerveza!!

Para terminar, si os encontráis un leprechaun - son duendecillos pelirrojos vestidos de verde - sabed que significa buena suerte. Yo, de hecho, ví una vez uno (no es broma): salió en una foto que revelé... (aunque Iker Jiménez no lo sacó en Cuarto Milenio...) Eso sí, ¡ no intentéis robarles sus ollas de oro porque pueden llegar a ser muy maliciosos!

Dicho ésto, ¡pasad un feliz Día de San Patricio!

Croquetas de Pollo

Con la carne y el caldo que me sobraron del puchero, hice estas deliciosas croquetas. Esta vez sólo llevan pollo, pero otras veces le echo la carne de cerdo o ternera que sobra del cocido. Aprovecho para contaros que he probado el aceite de koipesol que dice que los fritos absorben un 20 % menos de grasa y la verdad es que se notó en el papel absorbente donde pusimos las croquetas. Además, los rebozados se quedan muy crujientes y se doran homogéneamente, como veis en la foto.

Ingredientes:

- 150 g margarina
- 175 g harina
- 1/2 cebolla
- 300 ml caldo de puchero
- 700 ml leche
- muslos de pollo del puchero
- nuez moscada, sal y pimienta
- 1 huevo
- 1 chorrito de leche
- pan rallado
- aceite para freír

Preparación:

Ponemos la margarina a derretir en una sartén profunda. Añadimos la cebolla picada muy finita y pochamos hasta que esté blandita. Vamos espolvoreando la harina y moviendo con la espátula. Dejamos freír unos minutos para que luego las croquetas no saquen sabor a harina.

Mientras tanto, mezclamos un vaso y medio de caldo con tres vasos y medio de leche (en total un litro de líquido). Ponemos a calentarlo en un cacillo. Cuando la harina esté frita, vamos añadiendo la mezcla de caldo caliente y moviendo muy bien con las varillas para deshacer los grumos. Dejamos cocer unos 15 ó 20 minutos sin dejar de mover. Ésta es la parte más trabajosa, ya que hay que disolver muy bien los pegotitos de harina. Pasado este tiempo, incorporamos la carne del puchero picadita y añadimos sal, pimienta y nuez moscada. Cocer otros 10 minutos más o hasta que la masa esté lo suficientemente densa.

Dejamos la masa enfriar y la metemos en la nevera (mejor de un día para otro) para que se solidifique. Batimos un huevo con un chorrito de leche en un plato y llenamos otro con pan rallado. Vamos formando las croquetas con las manos húmedas y rebozando en huevo y pan rallado. Sólo queda freírlas y ¡a comer!

Puchero Andaluz

Hoy traigo una receta de las de toda la vida: un puchero. Esta vez lo he hecho sólo con pollo, pero se le puede poner también cerdo y ternera. El pavo también le da muy buen sabor. Cuando era pequeña, en mi casa se hacía una olla de puchero bien grande y luego la andábamos comiendo al menos tres días: el primer día con arroz, el segundo con fideítos, y el tercero, sopa de picadillo y croquetas. En el siguiente post, os dejaré la receta de las croquetas que he preparado con los restos de este puchero.

Ingredientes:

- 2 muslos de pollo
- 1 hueso blanco
- 1 trozo de espinazo o costilla salada
- 1 trozo de pellejo añejo
- 1 trozo de tocino salado
- 4 zanahorias
- 2 apios
- 2 nabos
- 2 patatas pequeñas
- 1 puerro
- un bote pequeño de garbanzos
- picatostes y hierbabuena

Preparación:

Ponemos los avíos (hueso, costilla salada, pellejo, tocino) en remojo la noche anterior. Si usamos garbanzos secos también hay que dejarlos en remojo (yo esta vez usé un botecito de garbanzos cocidos).

Ponemos a calentar agua en la olla express y, cuando hierva, añadimos los avíos desalados (y los garbanzos, si no son de bote). Vamos espumando las impurezas que suelte y, cuando deje de echarlas, tapamos la olla y cocemos 30 minutos desde que suba la válvula.

Mientras tanto, pelamos y raspamos las zanahorias, patatas, nabos, apios y puerro. Yo le quito la piel a los muslos de pollo también. Cuando abramos la olla, rectificamos de sal y añadimos las verduras y el pollo (y mis garbanzos de bote) y cocemos otros 10 minutos más con la olla tapada.

Sacamos las verduras y el pollo y reservamos. Los avíos se desechan (si nos gusta, podemos aprovechar el tocino para mojetear). Ya tenemos listo nuestro caldito de puchero y podemos tomarlo como nos guste. Yo el primer día le pico las verduras y uno de los muslos. Al siguiente varío: fideos, arroz o sopa de picadillo con huevo y jamón serrano. Y con el muslo y el caldo que sobra, las croquetas.

Consejo - La hierbabuena y los picatostes son esenciales para acompañar el pucherito! Que no se os olviden! También se le puede poner un chorrito de limón.

Puré de Patata y Col Gratinado

No soy muy ingeniosa a la hora de gastar la col que me sobra de otras recetas y siempre acabo haciendo los mismos platos: fideos chinos, chop suey, coleslaw, rollitos de col... así que he probado a ver que tal queda en puré. El resultado me ha gustado mucho y queda bien para acompañar otros platos, aunque también se le pueden poner más cositas en el relleno y hacer un plato más completo.

Ingredientes:

- 1 kg patatas
- 1/2 col blanca
- 1 cebolla
- 1/2 vaso de leche
- 2 cd mantequilla
- queso rallado
- nuez moscada
- sal y pimienta

Preparación:

Picar la cebolla finita y pocharla en una sartén. Cocer las patatas y la col troceada en ollas separadas con agua y sal, ya que tienen tiempos de cocción diferentes. Escurrir bien la col y picarla muy finita. Escurrir las patatas y triturarlas junto a la leche, la mantequilla y las especias. Añadir la col picadita y la cebolla pochada y moverlo todo muy bien, corrigiendo de sal si hace falta.

Pasar el puré a un pyrex y espolvorear con queso rallado. Gratinar a 200 ºC hasta que la superficie quede dorada y crujientita. Por supuesto, admite variaciones y podemos ponerle en el relleno bacon, pollo asado, jamón york, queso... Ya es ponerle imaginación.

Tortilla de Guisantes

Como ya os comenté en una ocasión, la tortilla de guisantes es una de mis preferidas. Además, me encanta ese dulzor que tienen los guisantitos... Aunque es la época, éstos son congelados. Si usáis los frescos, os diré el truquillo para que queden más tiernos y dulces: ponerles una cucharadita de azúcar en el agua de cocción.

Ingredientes:

- 4 puñados de guisantes congelados
- 1/2 cebolla
- 3 huevos grandes
- 1 chorrito de leche
- un poquito de azúcar (opcional)
- aceite y sal

Preparación:

Picamos la cebolla y la rehogamos en la sartén con un poco de aceite. Cuando comience a cambiar de color, añadimos los guisantes y dejamos que se vayan haciendo, moviendo de vez en cuando. Yo los tapé para que se hiciesen con su propio vapor. Cuando estén blanditos, le ponemos la sal y una pizca de azúcar.

En un bol, batimos los huevos con un chorrito de leche y sal. Añadimos los guisantes, movemos bien y volvemos la mezcla a la sartén. Dejar que se cuaje a fuego lento y luego dar la vuelta para que se haga por el otro lado. Qué disfrutéis!

Bocadillo de Queso de Cabra, Tomate Asado y Cebolla Caramelizada

Este es el riquísimo bocadillo que cenamos anoche. Teníamos un rulo de queso de cabra y empezamos a pensar en cosas que le irían bien y así surgió ponerle el tomate asado con hierbas provenzales y la cebolla caramelizada. ¡Ya véis que cenar un bocadillo no tiene porqué ser aburrido!

Ingredientes:

- pan de chapata
- rulo de queso de cabra
- tomate de rama
- cebolla
- lechugas variadas
- crema de vinagre de módena
- azúcar
- hierbas provenzales
- aceite y sal

Preparación:

Abrimos la chapata y la tostamos por la parte de dentro sobre una sartén-parrilla. Reservamos. En esa parrilla, untamos un poco de aceite y doramos las ruedas de tomate por ambos lados. La sal y las hierbas se las ponemos al final para que no nos suelte agua mientras se asa.

En otra sartén, vamos caramelizando la cebolla. La rehogamos con aceite y un poco de sal. Cuando esté tierna, la regamos con la crema de vinagre y el azúcar y dejamos que se vaya caramelizando a fuego suave.

Montamos el bocadillo, poniendo aceite de oliva en la base, los tomates asados, el queso de cabra y la cebolla caramelizada. Después gratiné las chapatas en el horno para que el pan se tostase por fuera y el queso se derritiera. Servir acompañado de lechugas variadas, que luego podéis poner dentro del bocadillo.

Tarta de Queso Tradicional al Horno

Continúo con mis incursiones en la repostería. Me he atrevido - por fin - a hacer la tarta de queso al horno ¡¡y es facilísima!! Con todo el tiempo que lleva mi pobre Peque pidiéndome que la haga... Ahora, eso sí, la ha disfrutado muchísimo. Se la comía con una cara de felicidad!! Yo, por mi parte, me he puesto mala con todas y cada una de las tartas que llevo publicadas en el blog, ya que soy intolerante a la lactosa. Así que a ver cuando me pongo a hacer una que no lleve lácteos... Aunque, en fin, con lo riquísima que estaba no me ha importado!

Ingredientes:


- 200 g galletas digestive
- 60 g margarina


- 250 g queso fresco con sal
- 3 huevos grandes
- 1 yogur blanco sin azúcar
- 1/2 vasito del yogur de leche
- 200 ml nata espesa
- 3 cd colmadas de harina
- 3 cd azúcar (o al gusto)

Preparación:

Poner las galletas troceadas en la picadora y triturar. Pasar a un bol y añadirle la margarina derretida. Mover muy bien para que se humedezca por igual. Engrasamos un molde desmolntable (el mío es de 22 cm) con margarina y harina. Yo le pillé papel sulfurizado en la base para desmoldarlo mejor. Vertemos la mezcla de galletas en el molde y aplastamos con las manos para que quede una base homogénea, resistente y bien apretadita.

Ponemos el resto de los ingredientes en el vaso de la batidora y lo procesamos hasta que quede bien finito y sin grumos. Echamos esta mezcla en el molde y metemos en el horno precalentado a 170 ºC hasta que al pinchar la varilla salga limpia. En el horno de turbo-convección me tardó unos 40 minutos, aunque le tuve que bajar la temperatura a mitad de la cocción.

Después de sacarla del horno, hay que dejarla enfriar a temperatura ambiente y meterla en la nevera de un día para otro para que se asiente (ya sé que es difícil esperar con semejante postre en el frigo...). Se puede tomar sola o con mermelada del sabor que queramos.

La verdad es que la tarta de queso philadelphia (sin horno) está muy buena, pero después de probar ésta... ¡¡¡Me quedo con la horneada!!!

Potaje de Garbanzos con Hinojos

El otro día iba a preparar un potaje de garbanzos, pero me llamó mi suegra y me dijo que tenía unos hinojos del campo, así que en vez de acelgas o espinacas, le puse los hinojos. A mí me gustan mucho porque le dan a los guisos un toque dulzón-anisado muy especial.

Ingredientes:

- 500 g garbanzos
- hojas de hinojo
- 1 patata
- 2 zanahorias
- pimiento rojo
- 1 ajo (usé ajo asado)
- 1/2 cebolla
- 3 cd tomate triturado
- caldo de verduras
- laurel
- colorante
- aceite y sal

Preparación:

Poner en remojo los garbanzos toda la noche (12 h). Lavarlos y ponerlos a cocer en la olla express con el caldo tibio, un poco de sal (si hace falta) y una hoja de laurel. Tenerlos cociendo durante 35-40 minutos desde que suba la válvula.

Mientras tanto, hacer un sofrito con el ajo (yo usé ajo asado, del que tenía congelado), la cebolla y el pimiento rojo picaditos y el tomate triturado. También aprovechamos para pelar y trocear las zanahorias, las patatas y los hinojos.

Cuando abramos la olla express, añadimos el sofrito, la patata, las zanahorias y los hinojos. Volvemos a cerrar y dejamos cociendo otros 10 minutos para que termine la cocción de los garbanzos y las verduras. Si quedase muy líquido, aplastar algún trocito de patata para espesar. Se le puede poner una chispita de colorante alimenticio, si queremos. Y, como todos los guisos, ¡está mucho mejor de un día para otro!

Calçots con Salsa Romesco

Los calçots son un tipo de cebolleta que se cultivan por la zona de Valencia, Cataluña y Aragón. Se asan sobre brasas y se sirven acompañados de salsa salvitxada o salsa romesco, que es la que he preparado yo. Es muy raro encontrar calçots aquí en Andalucía, pero desde el año pasado los traen en una tienda de mi barrio (claro que a un precio desorbitado), pero agrada darse este capricho de vez en cuando porque están riquísimos, sobre todo la salsita... En un mal caso, si no encontramos calçots, lo he hecho a veces con puerros y también queda bueno.

Ingredientes:

- calçots

Ingredientes Salsa Romesco:

- 4 ajos
- 1 tomate
- 2 ñoras
- 1 rebanada de pan tostado
- 1 puñado de avellanas
- 1 puñado de almendras
- 1 vasito de aceite de oliva
- 1 chorrito de vinagre
- perejil
- sal y azúcar

 

Preparación:


Lo primero es preparar la salsa romesco. Para ello ponemos a asar en el horno cuatro dientes de ajo ligeramente aplastados y un tomate con unos cortes en la piel, todo embadurnado con un poquito de aceite. Pondremos también en remojo unas ñoras (yo usé pimiento choricero) durante unas horas para que la carne se pueda retirar bien.

Pelamos los ajos y el tomate. Ponemos las avellanas, las almendras, el pan tostado, la carne de las ñoras, el tomate, los ajos y el vinagre en el vaso de la batidora y comenzamos a triturar, añadiendo el aceite poco a poco. Sazonamos con sal y una pizca de azúcar y, por último, agregamos el perejil y terminamos de triturar.

Por otra parte, limpiamos los calçots, quitándoles las primeras capas y los asamos a la brasa. Como no tengo barbacoa, los asamos en una parrilla. Por fuera se van a quedar muy negros, como véis en la foto.

Pero no os preocupéis, porque no se comen así... Se les quita la primera capa y por dentro están blanditos y muy jugosos. Se comen mojándolos en la salsa.

Huevos Rellenos Al Estilo de Mi Casa

Hoy traigo una receta de las de toda la vida, fácil y deliciosa: los huevos rellenos que llevaba al colegio todos los años para el Día de Andalucía cuando era pequeña. ¡Y tenían mucho éxito! ¡Os lo aseguro! Hay muchas formas de preparar los huevos rellenos, pero así es como se hacían en mi casa.

Ingredientes:

- 6 huevos
- 2 o 3 cd mayonesa
- 1 lata de atún
- cebolleta o cebolla
- 1 lata de pimiento morrón
- 1 lata de guisantes Hero
- aceitunas
- sal y vinagre

Preparación:

Cocemos los huevos en agua con un chorrito de vinagre para que no se rompan. Mientras se enfrían, picamos muy pequeñito un trozo de cebolleta y parte del pimiento morrón (el resto es para decorar) y los ponemos en un bol junto con el atún escurrido.

Retiramos la cáscara de los huevos y los partimos por la mitad en sentido longitudinal. Sacamos las yemas cocidas, reservando una de ellas para decorar. Ponemos las yemas en el bol, deshaciéndolas con los dedos, y agregamos la mayonesa. Lo removemos todo bien y, si es necesario, ponemos un poco de sal. Yo no le suelo poner porque la mayonesa ya tiene bastante sabor. Por último, añadimos algunos guisantes y movemos con cuidado de no romperlos mucho. Uso la marca Hero porque he notado que son mucho más dulces y blanditos que otros.

Con esta mezcla, rellenamos los huevos. Si el hueco de la yema fuese muy pequeño, lo que hago es vaciar un poco de parte blanca con un cuchillo y luego la pico y la uso para decorar. Así conseguimos un mayor espacio para rellenar.

Colocamos los huevos rellenos boca abajo en un plato de servir. En mi casa se pintaban un poco con mayonesa (en éstos no la puse). Luego se van decorando con los ingredientes reservados: guisantes, yemas, tiras de pimiento morrón y, si queremos, aceitunas.

Hojaldre de Atún con Pasas

Hace relativamente poco que descubrí las maravillas que se pueden hacer con hojaldre. El motivo es que, viviendo de alquiler, rara vez se tiene un horno. Pero desde que compramos el horno de turboconvección no dejamos de hacer cosas. Hoy os dejo este rico hojaldre de atún, pasas y tomate.

Ingredientes:

- 1 lámina de hojaldre
- 1 lata de tomate triturado
- 1/2 cebolla
- 1 ajo
- dados de atún en aceite
- 1 lata de pimiento morrón
- 1 puñado de pasas
- 1 cd azúcar
- aceite, sal y pimienta
- huevo (para pintar)
- 1 cd harina

 

Preparación:

En una sartén, sofreímos la cebolla y el ajito con un poco de aceite de oliva. Cuando la cebolla esté tierna, vertemos la lata de tomate, salpimentamos y añadimos una cucharada de azúcar. Dejamos que se vaya friendo, poniéndole una tapa medio abierta para que no nos manche mucho cuando salpique. Cuando lleve un rato, le añadimos las pasas rehidratadas y los pimientos a tiras y continuamos friendo hasta que el tomate quede bien frito y espesito. Añadimos los dados de atún escurridos, le damos unas vueltas y lo dejamos reposar para que se atempere.

Extendemos la lámina de hojaldre, la espolvoreamos con un poco de harina y lo estiramos con un rodillo. Cortamos los filos para darle forma rectangular. Ponemos el relleno de atún en una de las mitades, pintamos los bordes con huevo batido y cerramos el paquete, retorciendo los bordes. Decoramos la superficie con la masa que recortamos, dándole las formas que queramos. Pintamos toda la superficie con huevo y metemos en el horno precalentado a 180º C, colocando el hojaldre sobre un papel sulfirizado. Dejamos hornear hasta que esté doradito.

Como mi horno no calienta por debajo, tengo que darle la vuelta a la mitad con muchísimo cuidado, pero en un horno normal de casa no hace falta porque tiene resistencia debajo.

Tagarninas Esparragás

Bueno, más bien es un intento porque es la primera vez que las hago. Debería haberme quedado un majado más finito, pero como no lo machaqué lo suficiente se quedó como con costrones. ¡¡Pero la verdad es que quedó bueno!! ¡¡Parecían tagarninas con migas!! Jajaja! Tendré que cambiar el nombre por "tagarninas amigajás"...

Para quien no las conozca, la tagarnina es un tipo de cardo que crece salvaje en el campo aunque se puede encontrar en algunos comercios. Su sabor es algo amargo, como el de los cardos, y se usa en guisos, tortillas... o simplemente cocida y salteada. Al igual que los cardos, es muy laboriosa de limpiar. Yo a veces me pregunto a quién se le ocurriría comerse estos hierbajos... pero lo cierto es que están buenos!

Ingredientes:

- unos manojos de tagarninas
- un par de ajos
- 1 rebanada de pan
- 1 1/2 cd pimentón dulce
- 1 chorrito de vinagre
- 1 huevo por persona
- aceite de oliva virgen extra
- sal


Preparación:

Aunque las tagarninas de las tiendas vienen casi limpias (como en la foto), hay que dedicarles un buen tiempo a rasparlas, trocearlas y lavarlas. Una vez limpias, parecen unas pencas similares a los apios. Lo bueno es que no se oxidan tanto como los cardos.

Se ponen a cocer con agua y sal durante 15 minutos. Mientras tanto, se hace el majao. Para ello, freímos la rebanada de pan y los ajos. Los pasamos por el mortero (o incluso mejor por la picadora) y le añadimos sal, pimentón y un chorrito de vinagre.

Ponemos aceite de oliva (del más bueno que se pueda) en una sartén. Echamos las tagarninas cocidas y las salteamos hasta que estén tiernas. Incorporamos entonces el majao y removemos bien para que se mezcle. Rectificamos de sal y vinagre, pero sobre todo de sal porque suelen ser algo sosillas.

Según la receta tradicional, se escalfan los huevos en el aceite de las tagarninas (se supone que lleva bastante aceite). Pero como a mí no me gustan las cosas muy aceitosas, le puse menos aceite y freí los huevos en otra sartén.

Crema de Tomate y Queso

Con esta riquísima crema de tomate y queso voy a participar en el concurso "Come Sano, Cocina en Colores" del blog de Cocina con Ana. Os animo a que visitéis su blog, que tiene unas recetas espectaculares, y a que participéis en su concurso. El premio es genial: ¡¡¡kilos de verduras!!! Y en estos tiempos de crisis vienen muy bien...

 

Ingredientes:

- 600 g tomates muy maduros
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 1 cd concentrado de tomate
- 1 cd azúcar
- 1/2 litro de caldo de verdura
- 1 hoja de laurel
- tomillo
- 6 quesitos
- pan duro
- queso tierno
- aceite, sal y pimienta

Preparación:

Lavamos los tomates y los escaldamos en agua caliente. Los pelamos, los picamos bien pequeñito y reservamos. Picamos también la cebolla y la zanahoria. Las rehogamos en la olla express con un poco de aceite de oliva hasta que la cebolla se ponga transparente. Añadimos el tomate picado, el concentrado de tomate y la hoja de laurel. Le ponemos sal y azúcar y dejamos que se vaya friendo durante unos minutos. Cuando el tomate esté hecho, vertemos el caldo de verduras y tapamos la olla express. Dejamos cocer unos 10 minutos desde que suba la válvula.

Mientras tanto, cortamos el pan a daditos, los freímos y los ponemos a escurrir sobre papel absorbente. También cortamos unos daditos de queso tierno, que servirán para acompañar y decorar la crema.

Cuando termine la cocción de la olla, abrimos, retiramos la hoja de laurel y agregamos seis porciones de quesitos. Pasamos por la batidora hasta conseguir una crema finita y rectificamos de sal y pimienta. Por último, espolvorear con tomillo y servir con picatostes y daditos de queso tierno.

Cazón en Adobo

El cazón en adobo es una receta típica de Andalucía, sobre todo de la zona de Málaga y Cádiz (en esta última, le llaman Bienmesabe o simplemente Adobo). De hecho, lo ponen en todos los chiringuitos y bares de pescaíto. Es un plato muy conocido pero, para quien no lo haya comido nunca, os recomiendo probarlo. A mi novio, desde luego, le encanta...


Ingredientes:

- 4 rodajas de cazón
- 4 ajos
- 1 vasito de vinagre de vino blanco
- pimentón dulce
- orégano
- comino
- sal gorda
- colorante (opcional)

Preparación:

Cortar el cazón a taquitos y colocar en un recipiente. Quitar la piel a los ajos y majarlos en un mortero con sal gorda. Añadir pimentón dulce, orégano y comino al gusto. Se va echando vinagre mientras se remueve la mezcla hasta completar la capacidad del mortero (más o menos un vasito). Luego, si hace falta, se le pone más vinagre hasta que cubra el pescado. Un truco, para que el pescado salga más amarillito, es ponerle también un poco de colorante amarillo o azafrán.

 

Verter este adobo sobre el pescado, mezclar bien y dejar reposar en la nevera de uno a tres días, según lo fuerte que nos guste. Yo lo suelo dejar un día o poco más. Cuando se vaya a consumir, se ha de escurrir muy bien. Se reboza en harina, se fríe y se sirve recién hecho y crujiente. ¡¡Y desde luego que sabe a gloria bendita!!