Lascas de Chocolate con Sabores: Sal, Curry - Coco, Té Verde, Pimienta Rosa y Peta Zetas

Se acerca San Valentín y, aunque creo que no haré una comida especial porque cae entre semana, sí que quiero enseñaros esta receta fácil y rápida con la que impresionar a vuestras parejas: lascas de chocolate negro a la sal, de chocolate negro con curry y coco, de chocolate blanco con té verde (matcha), de  chocolate blanco con pimienta rosa y de chocolate con leche y Peta Zetas. Seguro que es un postre ideal después de una cena muy romántica!

Yo serví estas lascas de chocolate como "entrante" en la merienda que preparé para mi cumpleaños. Mis amigas quedaron encantadas, sobre todo con el chocolate de sabor a Peta Zetas! Fue un puntazo!! Nos reímos un montón comiéndolo, sobre todo por dos de mis amigas que, como son de otro país, no conocían los Peta Zetas!! Jejeje!

Ingredientes:

- chocolate negro

- chocolate blanco

- chocolate con leche

- sal en escamas (flor de sal)

- curry

- coco rallado

- té matcha

- pimienta rosa en grano

- Peta Zetas

Preparación:

CHOCOLATE NEGRO CON FLOR DE SAL:

Troceamos el chocolate negro (media tableta) y lo fundimos al baño María o en el microondas. Yo lo hago en el microondas porque es más rápido. Cada microondas es diferente, así que no os puedo decir un tiempo exacto. Lo mejor es fundir el chocolate al 50 % de la potencia, removiendo cada 30 segundos. Si vemos que está casi listo pero le falta aún un poco, podemos calentarlo a intervalos de 10 segundos más.

Colocamos una hoja de papel de horno sobre la encimera y vertemos el chocolate fundido. Extendemos con una espátula para formar una lámina fina y homogénea. Espolvoreamos unas escamas de sal y dejamos solidificar. Antes de que se haya secado, os recomiendo hacer una ligera presión para que la sal se incruste bien en el chocolate, así no se caerá al trocearlo.

Una vez solidificado, guardamos en la nevera con el papel de horno hasta el momento de servir. Para hacer las lascas, tan solo hay que ir separando la lámina de chocolate del papel y partiéndolo en trozos desiguales.

CHOCOLATE NEGRO CON CURRY Y COCO:

Fundimos media tableta de chocolate negro en el microondas, como expliqué antes, y lo extendemos sobre una hoja de papel de horno para formar una lámina fina. Espolvoreamos con coco rallado y curry. Dejamos solidificar un poco y hacemos una ligera presión con los dedos para que el coco se incruste mejor. Metemos en el frigorífico con el papel. A la hora de servir, partimos en trozos de diferente tamaño.

CHOCOLATE BLANCO CON TÉ VERDE:

Troceamos y fundimos una  tableta de chocolate blanco en el microondas, teniendo en cuenta que este chocolate es más delicado que el negro, ya que al contener más grasa, funde antes. Extendemos sobre papel de horno con una espátula hasta que quede una lámina fina.

Mientras solidifica, fundimos unas onzas de chocolate blanco (muy importante: usar otro cuenco limpio). Añadimos un par de cucharaditas de té matcha y removemos para disolverlo. Ponemos este chocolate al té en una bolsita o manga pastelera desechable, retorcemos el plástico para que quede bien apretadito y cortamos un pico de la bolsita (que sea un agujero pequeño). Vertemos el chocolate al té sobre el chocolate blanco formando líneas o cualquier otro dibujo. Metemos en el frigorífico. Cortamos en lascas justo al servir.

CHOCOLATE BLANCO CON PIMIENTA ROSA:

Como en las recetas anteriores, fundimos el chocolate en el microondas, extendemos finamente sobre el papel de horno y espolvoreamos un poco de pimienta rosa recién molida (si no tenemos molinillo, podemos machacarla en un mortero). Dejamos enfriar en la nevera y troceamos en lascas para servir.

Este chocolate, después del de Peta Zetas, fue el otro gran triunfador de la merienda.

CHOCOLATE CON LECHE Y PETA ZETAS:

Troceamos y fundimos el chocolate en el microondas, como expliqué anteriormente. Lo extendemos formando una lámina fina sobre papel de horno y espolvoreamos con Peta Zetas. Hacemos una ligera presión con los dedos para incrustarlos bien en el chocolate. Dejamos endurecer en la nevera. Para servir, despegamos del papel y rompemos lascas de tamaños desiguales.

CONSEJO:

Por si acaso, os aviso que cada vez que fundáis un nuevo chocolate uséis un cuenco limpio o lavéis y sequéis bien el que estéis utilizando. Nunca reutilicéis un cuenco con restos de chocolate fundido para derretir más chocolate porque se os quemará fijo.

Presentación en platos de pizarra, gentileza de la empresa Platos & Pizarras. Podéis adquirirlos aquí: http://www.platosypizarras.com