martes, 17 de junio de 2014
Pastéis de Belém (Pasteles de Nata Portugueses)
Los pastéis de Belém o pastéis de nata son unos pasteles típicos portugueses cuyo origen se remonta a más de 200 años de antigüedad. Parece ser que fueron creados por las monjas del convento de los Jerónimos, en el barrio de Belém, en Lisboa, muy próximo a la pastelería original cuya receta secreta guardan celosamente. Al cierre del monasterio en 1834, su panadero vendió la receta a uno de los miembros de la familia Alves, que en 1837 funda la pastelería Casa Pastéis de Belém, que ha guardando la receta secreta de generación en generación hasta la actualidad. La verdad es que he probado otros pasteles de nata en Lisboa y ninguno es tan exquisito como el de la pastelería original!
Ingredientes:
- 1 masa de hojaldre
- 200 ml nata
- 200 ml leche
- 2 cd maicena
- de 80 a 100 g azúcar
- 5 yemas de huevo
- azúcar glacé y canela
Para preparar el relleno de natilla, ponemos en un recipiente la nata, la leche, la maicena, el azúcar y las yemas de huevo y batimos todo junto. Lo pasamos a una olla y dejamos cocer unos minutos a fuego medio, removiendo, hasta que espese. Apartamos del fuego y dejamos enfriar.
En una superficie enharinada, estiramos la lámina de masa de hojaldre y la enrollamos. Cortamos 12 piezas. Las enharinamos ligeramente y las aplanamos con el rodillo para formar discos. Engrasamos unos moldes de magdalenas metálicos y colocamos en ellos los discos. Mis moldes son de silicona, así que mis hojaldres no quedaron tan dorados como los hechos en uno metálico. En los moldes de silicona no es necesario engrasar.
Rellenamos los cuencos de hojaldre con las natillas. Precalentamos el horno. Horneamos los pastéis de Belém a 220 ºC durante 30 minutos aproximadamente, dejando los últimos 5 minutos en la función grill / gratinar para que se doren por arriba.
Dejamos que se tibien un poco y espolvoreamos los pastéis de Belém (pasteles de nata portugueses) con azúcar glacé y canela antes de servir. Obviamente, no son como los auténticos pastéis de Belém, pero sí que le quitan a uno el antojo de tomarse uno sin tener que ir a Portugal!
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Como me gustan estos pastelitos ii son unaricura, un bocado delicioso, que maravilla y a estas horas me tomaria dosal postre encantada......Besss
ResponderEliminarUna manera muy original de usar el hojaldre. Las monjas se han caracteizado por hacer dulces deliciosos.
ResponderEliminarBesos hoy desde
http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2014/06/vos-lavas-el-pollo-antes-de-cocinarlo.html
son de locura estos pastelitos, dicen que es una de las recetan mejor guardadas, asi que solo con que se asemeje me lo llevo
ResponderEliminarLo mejor es comerlos allí que yo tambien tuve la suerte de hacerlo,recién hechos y en ese sitio tan bonito,,,pero oye,,,que los hechos en casa se parecen mucho, yo los hice distintos pero me llevo tu idea del hojaldre....besos
ResponderEliminarQue ricura de pasteles, menuda pinta.Besossss
ResponderEliminarAinss por dios que cosa más rica, estos pastelitos son un bocado delicioso. No los he hecho nunca en casa pero los he probado y enganchan jajajaja. Te han quedado divinos.
ResponderEliminarBesiness
De verdad q te kiero en mi casa eee... q delicia!!! Un besazo guapa
ResponderEliminarhttp://todreamtheimpossiblemnoeliaco.blogspot.com.es/2014/06/muchos-flecos.html?m=1
Son deliciosos estos pastelillos, yo los probé en Badajoz en una pastelería portuguesa.
ResponderEliminarSon divinos estos pastelitos, me encantan y eso que los he comido solo una vez, muy ricos, besos!
ResponderEliminarMe gustan los dulces portugueses no, me encantan¡ Así que lo mismo con estas maravillas ;) Mil besiños¡
ResponderEliminarTe han quedado fantásticos, me apetecen. Besitos
ResponderEliminarLlevo mucho tiempo queriendo probarlos porque tienen una pinta buenísima. Te quedaron estupendos ^^
ResponderEliminarUn besote!