¡Vuelve el Asaltablog, el reto más descarado de la blogosfera! Jajaja! Esta temporada, el primer blog asaltado ha sido Churretes de Cocholate, al que le he choriceado estas palmeras de hojaldre con chocolate. Son súper fáciles de hacer así que no hay excusas... ¡Anímate y revoluciona la hora de la merienda con estas riquísimas palmeras de hojaldre hechas en casa!
Ingredientes:
- 1 lamina de hojaldre
- azúcar
- chocolate negro para fundir
- sprinkles de colores (opcional)
Preparación:
Extendemos la lámina de hojaldre y la espolvoreamos generosamente con azúcar. Pasamos el rodillo por encima para que el azúcar quede incrustado en la masa. Plegamos los extremos del hojaldre hacia el centro. Volvemos a espolvorear con azúcar y a pasar el rodillo.
Enrollamos cada extremo hacia el centro y espolvoreamos con un poco más azúcar por fuera. Cortamos porciones de un dedo de grosor. Ponemos papel sulfurizado sobre una bandeja de horno y vamos colocando las palmeras de hojaldre, separadas unas de otras, ya que crecerán con el horneado.
Dejamos hornear a 180 ºC hasta que las palmeras de hojaldre estén doradas. Sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Cuando las palmeras estén frías, procederemos a cubrirlas con chocolate.
Para ello, troceamos el chocolate y lo fundimos al baño María o en el microondas, a intervalos de 30 segundos hasta que esté fundido. Removemos el chocolate hasta que quede liso y son tropezones.
Ayudándonos de una cuchara, extendemos el chocolate sobre la superficie de las palmeras. Cuando estén todas cubiertas, espolvoreamos unos sprinkles o bolitas de azúcar.
Metemos las palmeras de hojaldre con chocolate en la nevera durante unos minutos hasta que el chocolate se haya solidificado. Conservar en un tupper o caja de galletas. Si la temperatura ambiente no es muy alta, no es necesario refrigerar.
Q!ue ricas!!! Para chuparse los dedos. Un beso
ResponderEliminaray pero que bonitas te han quedado, el hojaldre me apasiona, ha hecho un buen asalto,besos
ResponderEliminarMmmm buenísimas! A mi me encantan y las tuyas han quedado preciosas además! Un besito
ResponderEliminarTe han quedado estupendas. Me encantan. besos
ResponderEliminarSin chocolate las palmeritas ya son una delicia así que con semejante cobertura todo un vicio y una tentación irresistible.
ResponderEliminarUn besito!
¡Que buenas estas palmeritas de chocolate, un buen asalto. Un saludo.
ResponderEliminarhttp://lacocinadeestela.blogspot.com.es
que riquísimas tienen que estar estas palmeritas me encantan.. te han quedado muy cuquis :)
ResponderEliminarun beso!!
http://elbauldelasdelicias.blogspot.com.es/
Has escogido una de mis recetas de antaño, jajaja, me encanta como te han quedado, además de ser sencillitas están de rechupete.
ResponderEliminarMil gracias por participar.
Besos
¡Receta fácil y perfecta para asaltar! Tienen un aspecto estupendo, seguro que el olor en la cocina tenía que ser increible, de los que llaman hasta a los vecinos, jaja. ¡Un abrazo!
ResponderEliminarhan quedado muy bonitas y cuquis, un asalto estupendo y que nunca falla en las meriendas
ResponderEliminarQue monadas de palmeritas, un vicio total. Besos.
ResponderEliminarQue chulada
ResponderEliminarQue palmeritas más ricas, con la cremita de choco por encima son irresistibles, cualquiera se toma solo una.
ResponderEliminarBesitos
Qué palmeras tan divertidas! Mi hija estaría encantadísima con ellas, además de por ser de choco y por los confites de colores, por la pinta tan espectacular que tienen
ResponderEliminarUn beso
Me encantan las palmeras de chocolate, son un vicio.
ResponderEliminarBesitos :)
Qué moninas están con sus sprinkles! Es que las palmeras son de un agradecido, con muy poco trabajo el resultado es ideal.
ResponderEliminarBesitos.
Beatriz
Las mini palmeras son un recurso estupendo para tardes de domingo, pero así pintadas con chocolate tienen que estar deliciosas
ResponderEliminarUn petó
Blanca
¿Cuánto tiempo pueden conservarse? ¿Una semana sería mucho?
ResponderEliminar¿Cuánto tiempo pueden conservarse? ¿Una semana sería mucho?
ResponderEliminarDiría que tres o cuatro días, como mucho. Ten en cuenta que no lleva conservantes extras añadidos.
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